¡Para ti…Motherflower!
Por fin llego la tan esperada película sobre la vida de "El Cantante de los Cantates", Héctor Lavoe, a las salas de cine boricuas. Fueron muchas las expectativas e interrogantes sobre como se iba a proyectar la vida de Lavoe en la pantalla grande. Para mí, como para cualquier salsero de la mata, la vida de tan importante figura de nuestra música popular ha sido investigada, estudiada y analizada para tener el panorama claro de porque su vida fue tan particular.
Héctor Pérez Martinez, nombre de pila, nació en el barrio de Machuelitos en Ponce allá para las década de los 40. Su agrado por la música fue básicamente innato al ser su madre cantante de iglesia y su padre pertenecía a un trío. Fue gran admirador de la música campesia y estudio em la escuela libre de música Morel Campos en Ponce junto a otra estrella del género, Papo Lucca. Ya a los 17 años, y con el sueño de encontrar la fama, se traslada a New York a vivir con su hermana. Se presento en varios clubes en la gran manzana, pasando por la orquesta de Kako Bastar y Bobby Rodríguez. En una de esas noches un tal Johnny Pacheco lo observa y decide unirlo a Wille Colon. Como ya saben el resto es historia…
Tengo que mencionar que conociendo la vida de Lavoe, pensé que la película no me iba a dar sorpresas. Nunca imagine que iba a comenzar dándole la imagen de adicto sin valores que llegaba siempre "embollao" a todas las presentaciones, pero pasaba por desapercibido ya que la fama se lo permitía. Con un principio así era obvio que la trama se dirigía a su adicción a drogas y su vida enfermiza como esposo en una relación tormentosa. El Lavoe bajo las sustancias que quisieron proyectar no es el adorado por la fantaticada, sus compañeros y amigos. Esto es totalmente incierto. El Lavoe que viajo, canto, compartio con el público y fue explotado por Masucci y su empresa fue el artista con la magistral voz de "jibarito agallao'". El querer proyectar su abuso de drogas, el llegar tarde a las presentaciones y las orgías en los hoteles, fue agudizar lo obvio de la que acontecía con la mayoría de los artistas en esa década donde la cocaína era la moda y el SIDA era un mito.
Este proyecto cinematográfico bajo la tutela de Marc y Jennifer, tengo que admitir, tuvo resultado. Básicamente es un guión sobre la vida de Lavoe relatado por el recuerdo de Puchi como compañera, esposa y cómplice de la vida de "joda" que ambos tuvieron en NY. La gran JLO realizo un gran papel de mujer cojonua', comprensiva, trepadora y cabecilla de Lavoe en sus intereses como artista bajo el catalogo Fania. Fue una gran oportunidad de JLO de conseguir reconocimiento, ya algo perdido, en la comunidad puertorriqueña de NY, y al mismo tiempo reforzar su imagen como mujer latina en el cine americano. Es muy probable que le den una nominación por este papel y le traerá mas trabajo con personajes similares en un futuro.
En lo que concierne a Marc tengo que mencionar que físicamente es el clon de Lavoe definitivamente. Su parecido es tan impresionante que apuesto que nunca le hizo falta el maquillaje. Considero que el papel lo hizo con gran respeto y admiración, pero fue muy cauteloso en no dejar ser Marc Anthony, la mega estrella de la música latina, especialmente cuando interpretaba algún tema en la película.
Y es esto la otra gran falla que quiero recalcar. La música de Lavoe es llevada como si fuera un video musical, algo pintoresco, con pocos músicos, y demasiado colorido, como si fuera un carnaval. Siendo algo puritano a lo que concierne la salsa y recordando lo que sucedió en esos temas, tengo que mencionar que fueron muy mal escenificados. El mismo tema de "Mi Gente" que es el himno nacional de Lavoe en sus presentaciones con la Fania, y considero que es el tema que fundió el lazo de Lavoe con su público salsero al ser grabado en el disco Fania Live in Yankee Stadium, se proyecto como si fuera la parada puertorriqueña en un callejón en San Juan con JLO al lado con una camisa de promoción aludida al sello disquero. Esto fue lamentable para todos nosotros que adoramos esa canción y sabemos lo que sucedió en realidad esa noche del 73' inagurando el coliseo Roberto Clemente que lucía una camisa de manga larga dorada, un lasito y expresa de manera única su sentir como puertorriqueño junto a los grandes como: Cheo, Pete, Miranda, Richie y Bobby, Miranda, Willie etc. La otra es el famoso "Quítate tu..pa' ponerme yo". Igualemente, en esta ocasión no aparece ninguna figura importante de la Fania y mucho menos indica al Cheetah como el lugar de origen.
El público salsero quiere recordar y revivir ese momento tan inmemorable e inigualable de la era dorada de la salsa. Fue un momento único que nunca regresará y que la nueva generación de aficinados al género solamente tiene recursos visuales para poder transportarse a ese momento donde la SALSA reinaba en las calles newyorkinas y boricuas. Necesitamos una visión más genuina en el séptimo arte que conmueva y estremezca con la salsa gorda. Hay que presentar la autenticidad de todas esas estrellas que participaron en esa época de forma gloriosa y honrar a todos los grandes que se han ido a la rumba celestial. Espero que sigua el ímpetu de producir más cine salsero y que se eleve la importancia de recrear lo que realmente sucediera en cada tema plasmado en toda conciencia salsera.
Sr. Leon Ichaso, este Mi Gente no se parece un carajo! al de la película.
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